Primero de todo: ¡felicitaciones por decidir contar con un seguro de viaje! Es una herramienta que te va a horrar muchos dolores de cabeza. Y, al mismo tiempo, te permitirá disfrutar con más intensidad tu viaje turístico, de trabajo, de estudios, familiar o por salud.

Ahora bien, entre las numerosas opciones online que encuentras hoy, te contaremos los cuatro beneficios que conlleva quedarte con nosotros, con Tu Seguro de Viaje.

El primer beneficio es nuestra trayectoria de muchos años en asistencia al viajero. Solo a través de esa experiencia es posible brindarte la mejor ayuda en el momento en que más la necesitas. Eso implica empatía hacia ti y tu situación.

El segundo beneficio es que contamos con un grupo de asesores que conocen bien los distintos seguros, y están realmente interesados en que tengas que el que te conviene de verdad. Esta gente es la que hace que quienes viajan vuelvan a confiar en nosotros cada vez que comienzan a preparar su itinerario.

El tercer beneficio: disponemos de un cotizador con más de 2500 seguros distintos. Eso implica que, claramente, habrá uno que se adapta a lo que estás buscando.

Y el cuarto beneficio es que en Tu Seguro de Viaje trabajamos con las 20 compañías aseguradoras más confiables del mercado. Eso es una garantía adicional para tu tranquilidad.

Ahora, hablemos de los errores que se pueden llegar a cometer al emprender la aventura de viajar.

Como ya puedes imaginar, el error común a todas las personas –aunque ya no tan habitual– es no averiguar si el lugar de destino exige un seguro de viaje a fin de ingresar a su territorio. Cada vez son más los países que han puesto esa condición.

Los otros errores son:

• Llenar en exceso la maleta. Toda la ropa que se lleva “por si acaso” luego se convierte en un lastre molesto en el aeropuerto, los medios de transporte y el hotel. Además, un eventual sobrepeso terminará siendo un costo extra a abonar, que siempre va a ser mayor que comprar un sweater, una falda o una camisa en el sitio de destino.
• No imbuirse de la cultura local. Aunque el viajero no sea antropólogo o sociólogo, es bueno investigar en la Web sobre la historia, las tradiciones, las creencias de las personas cuyas ciudades se van a conocer. Ello ayuda a que el viaje sea una verdadera revelación, y no algo solo superficial o una simple experiencia juzgada desde el propio punto de vista.
• No ser flexible. Todo viaje tiene un componente de aventura y es aconsejable saberlo. La flexibilidad permite animarse a cambiar los planes y a tomar esos cambios con humo
• No tener un plan. Si bien la flexibilidad es un aspecto positivo, el contar con un plan hace que se ahorre tiempo y dinero. Un ejemplo: hay museos que son gratuitos algunos días a la semana. Como ese caso, existen otros que solo se pueden aprovechar si se investiga un lugar a fondo antes de llegar a él.
• Tratar de ver todo. Un viaje por Europa de 15 días no debería incluir 10 países. El rápido cambio de paisaje, de medio de transporte y de lugar de alojamiento generará un estrés que no es compatible con un viaje de placer. El placer es justamente eso: hacer lo que a uno le place, no lo que los sitios web, las guías turísticas o los amigos dijeron que hay que visitar “sí o sí”.
• Preparar la maleta en el último minuto. Eso trae dos consecuencias: se llevarán cosas de menos o de más, y no habrá orden. Sumado a ello, la ropa quedará arrugada porque no hubo tiempo de acondicionarla como corresponde. Y es posible que no quede espacio libre para algunos recuerdos que, inevitablemente, se adquirirán en el punto de destino.

Ahora que conoces ciertas cosas extra que te servirán para tu viaje, solo nos resta invitarte a charlar con nuestros –tus– asesores. Ellos responderán cada una de tus preguntas y te brindarán toda su experiencia para que descubras el seguro óptimo para tu caso.

Consúltanos. En TuSegurodeViaje.net deseamos que tu próximo viaje sea sencillamente inolvidable. Y seguro.